En un sentido metafórico o literario, 'piel' puede referirse a la capa externa que protege o cubre algo, no necesariamente físico. Puede simbolizar la apariencia externa o la fachada de una persona o cosa. sustantivo
En su novela, el autor describe la ciudad como una entidad viva, cuya piel es la arquitectura que la cubre.
La piel de la sociedad puede parecer perfecta, pero debajo hay muchos problemas ocultos.
En literatura, 'piel' también puede usarse para describir la sensibilidad o vulnerabilidad emocional de una persona, como si sus emociones estuvieran expuestas en la superficie. sustantivo
El poeta escribe sobre tener la piel del alma expuesta al mundo, sintiendo cada emoción intensamente.
Con cada crítica, sentía que su piel emocional se volvía más delgada y frágil.